Valle de Paiva
El río Paiva muestra su fuerte carácter por la forma salvaje en que fluyen sus aguas. A lo largo de los últimos dos millones de años, el Paiva ha modelado el paisaje de este valle, convirtiéndose en guardián de una biodiversidad única.
Aquí encontramos la macromia (Macromia splendens), la vaca rubia (Lucanus cervus), la salamandra lusitana (Chioglossa lusitanica), la ciénaga del Duero (Pseudochondrostoma duriense) y varias otras especies. En torno a las orillas de este río se cuentan muchas leyendas e historias que enriquecen el patrimonio inmaterial de la región. Las Aldeias de Portugal® de Paradinha y Meitriz son testimonios vivos de esta identidad.
Los 12 geositios que componen la Ruta de los Geositios del Geoparque de Arouca también nos ayudan a recorrer mejor los caminos de la historia de la Tierra. Y, por supuesto, las Pasarelas de Paiva, una riqueza natural incomparable y la proximidad del río, donde se puede sentir toda la vida que fluye en él (y a través de él).